Por Gabriela Márquez
A finales de junio de 2013, mientras los líderes de Estados Unidos lo etiquetaban públicamente de «cobarde» y «traidor», Edward Snowden se escondía de las autoridades norteamericanas en la Terminal F del aeropuerto de Hong Kong.
‘’Terminal F: Cazando a Edward Snowden’’ es un documental que dramatiza intensamente lo ocurrido momentos antes y después de la llegada de Snowden a esa región del mundo, tratando de evadir la persecución de la que estaba siendo objeto.
Solo tres semanas antes, había entregado casi un millón de documentos ultra secretos de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) a periodistas de los diarios y publicaciones más reconocidos del mundo. Estos materiales clasificados pintaron una imagen aterradora de un gobierno de los Estados Unidos impulsando actividades de vigilancia que excedieron con creces los límites constitucionales y cuyos esfuerzos funcionaron para sabotear los intereses de los ciudadanos comunes a los que juraron proteger. Una vez que los documentos fueron revelados al mundo y la identidad de Snowden fue expuesta, se produjo una búsqueda mundial masiva
Intentando ocultarse de sus perseguidores, Snowden nunca supo cuándo podría ser arrestado o incluso asesinado. Ahora era enemigo del estado. El gobierno de los Estados Unidos, implacable y hostil por las revelaciones hechas en los documentos filtrados, fue diligente en sus intentos de arreglar la extradición a su país para que Snowden pudiera enfrentar las consecuencias legales de sus acciones. Al final, un simple error administrativo fue el único factor que lo ayudó a evadir el daño o la captura.
Brillantemente fotografiado y con una excelente edición, Terminal F: Cazando a Edward Snowden (Terminal F: Chasing Edward Snowden) describe el puesto que el ocupaba en la NSA, sus motivaciones para exponer materiales sensibles y potencialmente dañInos para la paz mundial, y la realidad de vivir como uno de los denunciantes más notorios en la historia de Estados Unidos. Aunque puede parecer un territorio muy trillado, ya visto anteriormente, la película proporciona conocimientos nuevos y reveladores, gracias a entrevistas con su padre, sus compañeros de trabajo, el ex director de la NSA Michael Hayden, el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, el reportero Glenn Greenwald y el propio Snowden.
Ya sea que usted crea que Snowden es un pecador o un santo, la película probablemente resultará más esclarecedora en sus minucias. Aprovechando las perspectivas momento a momento de las figuras de ambos lados de la historia, la narrativa se desarrolla como un juego real del gato y el ratón. Lo cual nos ofrece una idea muy clara y certera de lo que debe sentirse ser un hombre perseguido por el país más poderoso de planeta.
Dirigida por: John Goetz, Poul-Erik Heilbuth